El turismo de cruceros crecerá en 2017 más en Ibiza que en el resto de Balears, según una información facilitada ayer por la Autoridad Portuaria de Balears (APB) elaborada con las previsiones de reservas de las grandes compañías de este segmento turístico. La APB espera que el número de escalas (amarre en puerto) de embarcaciones con cruceristas aumente un 34% con respecto a las cifras registradas este ejercicio de 2016. Si se confirman estas previsiones, el organismo portuario calcular que la ciudad recibirá a más de 320.000 pasajeros la temporada que viene.
Vila ha recibido este año la visita de 139 cruceros, cuando en 2015 la cifra se redujo a 120. Para 2017 la APB prevé la llegada de 187 cruceros, lo que representa 48 escalas y alrededor de 73.000 pasajeros más que en este ejercicio.
La APB justifica este incremento de la actividad por la entrada en funcionamiento de los duques de Alba en es Botafoc y por la «confianza depositadas por las principales navieras crucerísticas».
