Para el desarrollo de las obras hidráulicas aledañas al Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAICM), el gobierno federal aplicará recursos hasta por 20 mil millones de pesos, que supera a la que se ejercerá en infraestructura en general para tres entidades del país.
En el Plan Nacional de Infraestructura (PNI) de esta administración contempla para Coahuila, Tlaxcala y Querétaro obras de comunicaciones y transportes, salud, turismo, energía y vivienda una inversión, en conjunto, de 9 mil millones de pesos, los que representa casi solo la mitad de lo que se destinará al proyecto hidráulico de la nueva terminal aérea.
Cabe destacar que las obras de infraestructura de estos tres estados y las aledañas al proyecto del aeropuerto se realizarán en el mismo periodo, es decir, durante este sexenio.
También este monto es equiparable a lo que se va invertir en lo que se conoce como la obra hidráulica más importante a construirse en este gobierno, que es el Acueducto Monterrey 6, pues será el más largo de América Latina, con una longitud de poco más de 500 kilómetros.
De la obra, 130 kilómetros ya existen y se construirán 372 más. Es el primero de la lista de cinco proyectos de acueductos que plantea la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y para lo cual se invertirán más de 17 mil millones de pesos.
Asimismo, mientras que en el plan sexenal de infraestructura de la actual administración no se destinará un solo peso a siete entidades del país para proyectos hidráulicos y que en 10 de ellos la inversión no supera los mil millones de pesos para obras de esta índole, al nuevo aeropuerto se canalizarán 20 mil millones de pesos.
El PNI señala que Sonora, Durango, Aguascalientes, Guanajuato, Colima, Tlaxcala y Oaxaca no tienen obras en esta materia para realizarse durante este gobierno.
En tanto que Chihuahua, Coahuila, San Luis Potosí, Querétaro, Michoacán, Morelos, Veracruz, Puebla, Yucatán y Quintana Roo, en conjunto, apenas suman una inversión por 3 mil 240.7 millones de pesos; este monto no representa ni la cuarta parte de lo que se destinará a las obras del NAICM.
El pasado 4 de septiembre, el gobierno federal presentó el proyecto del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México acompañado de un plan maestro hidráulico en el vaso de Texcoco, a cargo de la Conagua, con el que se pretende reducir riesgos sanitarios, inundaciones recurrentes e incrementar la oferta de agua limpia en la región.
Son más de 25 obras directas e indirectas para beneficio del nuevo aeropuerto, que se construirán entre 2014 y 2018 en el Valle de México, cuando la entidad que tiene más proyectos a desarrollar en el PNI es Chiapas, con nueve obras.
Asimismo, estas más de 25 obras representan más de la mitad de lo que se hará en la región sur-sureste (Guerrero, Puebla, Veracruz, Oaxaca, Chiapas, Tabasco, Campeche, Yucatán y Quintana Roo), donde se contemplan 42 proyectos por 31 mil 784 millones de pesos.
De acuerdo con la misma Comisión Nacional del Agua, en su agenda de 2030, explica que las inversiones se concentran en el Valle de México, porque históricamente las inundaciones han afectado más estas regiones.
Sin embargo, ha derivado en rezago de algunas entidades como las que integran la región sur-sureste.
David Korenfeld, director de la Conagua, declaró en días pasados que la planeación de las obras hidráulicas para captar, conducir, regular y desalojar eficientemente las aguas negras y fluviales se ha venido realizado desde tiempo atrás.
Incluso, dijo, en 1994 se integró un Plan Maestro de Drenaje de la Zona Metropolitana del Valle de México .
Las obras que se van a ejecutar, independientemente de la construcción de un nuevo aeropuerto, estaban contempladas para realizarse en el mediano y largo plazo desde hace muchos años y se pararon, pero ahora las están retomando.
Durante este año se han licitado 25 obras y ya se han adjudicado algunas de ellas.
Entre ellas la construcción de tres plantas de tratamiento de aguas residuales, un interceptor pluvial, la construcción y rehabilitación de nueve lagunas de regulación, el túnel Churubusco-Xochiaca; este último ya fue adjudicado en agosto pasado a la empresa constructora ICA, por el cual obtuvo un contrato por 2 mil 566 millones de pesos.
También está la construcción de 24 plantas de tratamiento de aguas residuales, el Túnel Chimalhuacán II y el entubamiento del Río de los Remedios.
Aunque Korenfeld ha negado que los proyectos sean para el nuevo aeropuerto internacional, en el análisis costo-beneficio de éste se señala que “en materia hidráulica durante 2013, a partir de agosto y hasta diciembre, se realizaron todos los estudios de preinversión.
Además, se analizó la necesidad de construir túneles profundos; entubamiento de cauces y colectores marginales para los ríos denominados del oriente.
También se busca la rehabilitación y construcción de plantas de tratamiento; revestimiento de canales; ampliación, rectificación y construcción de lagunas de regulación; construcción de bordos; modificación a plantas de bombeo y rehabilitación de canales existentes y construcción de colectores de estiaje.”
Especialistas del Grupo Financiero Monex indicaron que si bien se espera ver un beneficio para las constructoras mexicanas con obras del propio aeropuerto, en el corto plazo éstas tienen la oportunidad de entrar en los proyectos hidráulicos y de vialidades, como es el caso de ICA, Carso, Coconal, GIA, Tradeco y OHL, y todas ellas ya han trabajado para Conagua.
“Consideramos que las empresas locales interesadas buscarán contar con los recursos disponibles, así como mantener un apalancamiento prudentes; los beneficios del nuevo aeropuerto serán de largo plazo e incluirán obras adicionales que resultarán de su interés”, señalaron.
Milenio
