LA SECRETARÍA DE MARINA, COMO AUTORIDAD MARÍTIMA NACIONAL, CELEBRÓ EL “DÍA DE LA ARMADA DE MÉXICO” EN VALLE DE BRAVO, ESTADO DE MÉXICO
La Secretaría de Marina, como Autoridad Marítima Nacional, a través de la Dirección General de Capitanías de Puerto y Asuntos Marítimos, por conducto de la Capitanía de Puerto de Valle de Bravo, realizó esta mañana la ceremonia del “Día de la Armada de México” en la Alameda Bicentenario del municipio de Valle de Bravo, Estado de México, para conmemorar la consolidación de la Independencia Nacional; acontecimiento histórico que se llevó a cabo el 23 noviembre de 1825.
El acto estuvo presidido por el Comandante del Cuartel General del Alto Mando, Vicealmirante Arturo Ramón Boscó Romero, así como por autoridades navales, militares y civiles, alumnos de cinco escuelas primarias de citado municipio y población en general.
Posterior a la ceremonia, se realizó un ejercicio de exhibición de búsqueda y rescate en el lago de Valle de Bravo, el cual consistió en salvaguardar la vida humana a través de personal naval especializado, quien a bordo de una embarcación tipo Defender, una moto acuática y un helicóptero, rescató a tres personas después de una supuesta colisión entre una embarcación menor y un kayak (situación probable que ocurra por la gran afluencia de turismo náutico en esta zona).
Lo anterior forma parte de las funciones de Guardia Costera de la Secretaría de Marina; así la Autoridad Marítima Nacional se refuerza a través de las Estaciones Navales de Búsqueda, Rescate y Vigilancia Marítima (ENSAR) para la salvaguarda de la vida humana en la mar e incrementar la capacidad de respuesta ante incidentes o accidentes marítimos, lo que permite estar a la altura de los puertos más desarrollados del mundo.
Es de recordar que cada año la Secretaría de Marina conmemora el día 23 de noviembre como la fecha memorable en que la recién integrada Marina de Guerra Mexicana logró en 1825 hacer efectiva la rendición de las tropas españolas que se resistían a reconocer la Independencia de México, mismas que estuvieron atrincheradas por espacio de varios años en la fortaleza de San Juan de Ulúa.