El puente que conectará al aeropuerto de Tijuana con el recinto de Otay Mesa, en California, ya fue colocado del lado mexicano. Se espera que en este mes terminen las labores del lado estadounidense.
Así lo dio a conocer el Grupo Aeroportuario del Pacífico (GAP) en un comunicado, donde indica que el puente peatonal Cross Border Xpress (CBX) es un proyecto binacional sin precedentes que se extenderá sobre la frontera entre Estados Unidos y México.
Dicho puente conectará al edificio de migración y aduana americana de Otay Mesa con el Aeropuerto Internacional de Tijuana, mismo que ya realizó las adecuaciones correspondientes en sus instalaciones.
El levantamiento del puente de 150 toneladas se llevó a cabo en dos días. Tiene una longitud de 45 metros lineales del lado mexicano, aunque en total será de 130 metros.
“El proceso tomó cerca de 10 horas y un equipo de más de 70 profesionales para completar las maniobras de forma satisfactoria”, menciona GAP.
“Es emocionante ver estas dos grandes secciones del puente colocadas en su lugar. Esto representa el más visible avance del proyecto, mismo que los funcionarios regionales, los organismos y los consumidores han esperado por muchos años”, expresó Enrique Valle, director del proyecto CBX.
Se trata de un puente de cristal reflejante de color morado que descansará sobre cuatro estructuras de soporte de hormigón de cinco metros de alto; la fachada de vidrio será instalada dentro de los próximos meses.
Infraestructura en EU
En el lado norteamericano, refirió Valle Álvarez, el CBX contará con más de 6,500 metros cuadrados de patio interior y exterior, áreas de espera para pasajeros y visitantes, además de tiendas de convivencia, alimentos y bebidas, estacionamiento a corto y largo plazo, diversos tipos de transporte terrestre e información y servicio al pasajero totalmente bilingüe.
El CBX está diseñado para cumplir con los estándares de seguridad internacionales y será operado por Customs and Border Protection (CBP) en el lado americano, e Inmigración y Aduanas de México, en el lado nacional.
Movilidad
“El CBX se desarrolla de forma privada para el uso exclusivo de los pasajeros con boleto del aeropuerto de Tijuana que cruzan la frontera México-Estados Unidos, como parte de sus viajes”, explica GAP.
De acuerdo con datos estimados por este grupo aeroportuario, más de 2 millones de pasajeros al año en Tijuana cruzan la frontera a través de las congestionadas garitas de San Ysidro y Otay, soportando impredecibles tiempos de espera y a menudo largas demoras.
Así, los usuarios del puente podrán acceder a los vuelos del aeropuerto de Tijuana hacia México, muchos de los cuales tienen una mayor frecuencia o costos más bajos que los ofrecidos por los aeropuertos del sur de California.
Inversión de altos vuelos
Este proyecto privado representa una inversión de 120 millones de dólares, el cual es operado y desarrollado por Otay Tijuana Venture LLC, un grupo de accionistas estadounidenses y mexicanos, contando también con el financiamiento de Bancomext e Invex.
En tanto que los contratistas en México son Grumesa (gerente de construcción), Espazio (supervisión de obras), Corey (contratista de acero) y Fercon Qualitas (gerente de desarrollo).
Los contratistas de Estados Unidos incluyen a The Harrison Company (garantía de calidad), Turner Construction y Hazard Construction.
Este proyecto binacional inició su construcción en mayo de 2014 y se estima iniciar operaciones a los pasajeros a finales de este 2015.
El Economista