Al no ser negocio ya la operación de la Terminal de Desguace de Buques a cargo de la empresa Reciclajes Ecológicos Marítimos (Ecomar), cuya inversión inicial fue de 7 millones de dólares y en una segunda etapa de 23 millones más de la misma moneda, ahora en forma conjunto con la Administración Portuaria Integral de Lázaro Cárdenas (APILAC), se busca reorientar el funcionamiento de la misma, con una inversión estimada en unos mil millones de pesos.
La empresa que ganó una licitación hace más de diez años, además de desguazar buques dados de baja por Petróleos Mexicanos y que algunos de ellos se encontraban ya en este puerto, como el Mariano Escobedo, Manuel Avila Camacho y el Revolución, su proyecto se sustentaba más en la adquisición de navíos en desuso de la Armada de los Estados Unidos.
Sin embargo, al cambiar las políticas del vecino país del norte, sus autoridades dispusieron que ningún barco saldría de esa nación, dejando así a la terminal de Ecomar sin materia prima para trabajar. El astillero de desmantelamiento, almacenaba, aprovechaba la chatarra, diferenciaban los metales, era única en México, tenía permisos de manejo de fluidos y de residuos peligrosos.
La Terminal de Desmantelamiento de Embarcaciones de Lázaro Cárdenas dejó de operar a falta de barcos para desguazar, pero el mismo recinto está por ser utilizado para otro nicho de negocio que ocupará de una inversión de más de mil millones de pesos, dio a conocer la Administración Portuaria Integral de Lázaro Cárdenas (Apilac).
El Cambio Michoacán