Mientras que Aeroméxico y Volaris superaron ya la etapa de crecimiento sin ganancias y volvieron a la senda de la rentabilidad, Interjet todavía enfrenta problemas financieros.
En el último trimestre de 2014, la aerolínea perdió 400 millones de pesos, un resultado negativo respecto a los 162 millones de pesos que logró ganar en los últimos tres meses de 2013.
La aerolínea atribuyó este resultado al encarecimiento del dólar, que provocó que su deuda por financiamiento se elevara en 251.7 millones de pesos, hasta llegar a 439.2 millones.
La compañía aérea de la familia Alemán se vio afectada, como el resto de las aerolíneas domésticas, por una guerra de precios surgida a finales de 2013 y que dejó estragos para la mayoría de las aerolíneas hasta la primera mitad de 2014.
Sin embargo, Grupo Aeroméxico y Volaris lograron salir adelante.
De acuerdo con los últimos reportes financieros que enviaron a la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), la primera ganó 761 millones de pesos y Volaris, 702 millones de pesos en el último trimestre del año pasado.
En gran parte, esto se debió a que concentraron sus esfuerzos en aumentar su oferta en vuelos internacionales.
Enrique Beltranena, director general de Volaris, anticipó que la oferta de asientos al exterior crecería entre 33 y 36 por ciento, en tanto que en vuelos domésticos, el aumento sería de 2 a 4 por ciento.
Mientras tanto, Aeroméxico calcula crecer de 11 a 13 por ciento en vuelos internacionales, y de 4 a 6 por ciento en vuelos domésticos.
Interjet también ha dicho que quiere seguir esta tendencia, pero tiene un número menor de rutas al extranjero.
Concretamente, tenía 10 rutas a Estados Unidos, contra 38 de Volaris y 28 de Grupo Aeroméxico al 17 de marzo de este año.
Su director general, José Luis Garza, la ha descrito como una aerolínea enfocada principalmente al mercado doméstico.
Agencias
