El movimiento de productos perecederos en el aeropuerto internacional de Guadalajara aumentó considerablemente en los últimos seis años: pasó de 90 toneladas anuales a 9 mil, informó Mario Humberto Torres Berlín, presidente de Almacenadora WTC.
Dijo que existen casi mil metros de cámaras frías, lo que permite el proceso de almacenaje y de armado de palets (tarimas) para luego cargar los aviones.
“Eso permite que todos los exportadores que han crecido, ya que eran cinco hace seis años y ahora son más de 110, no tengan problema con la mercancía”, dijo.
Agregó que hay más de 60 frecuencias semanales de las que nueve son cargueros puros, esto es que no trasportan pasajeros, sólo mercancía.
“Ahorita estamos enviando casi a todo el mundo. El año pasado empezaron los vuelos tanto a Corea como a Hong Kong; está por abrirse un puente aéreo a la provincia de Henan en China y se está abriendo una ruta a medio oriente”, precisó.
“Ya existía a Europa, América del Sur y Norteamérica; entonces, se están prácticamente desarrollando rutas para todo el mundo partiendo de Guadalajara”.
El presidente de Almacenadora WTC, que opera en el aeropuerto de Guadalajara, añadió que hay un proyecto llamado River Trade, que consiste en traer mercancía vía marítima, luego trasladarla por tierra al aeropuerto Miguel Hidalgo y, finalmente, hacerla llegar por aire a su destino.
“Es un proyecto que ya está funcionando, todavía no es mucha la mercancía. La semana pasada estuvo el subsecretario de Agricultura de Chile junto con el secretario (de Desarrollo Rural), Héctor Padilla, y todo fue para desarrollar esta ruta”, explicó.
Torres Berlín manifestó que anualmente se mueven 120 mil toneladas de todo tipo de productos.
Informó, además, que se están buscando conexiones de envíos directos que bajen el tiempo y el costo para hacer llegar los productos.
De toda la mercancía de carga que se mueve, los volúmenes mayores los encabezan las berries y los aguacates, pero también se abre espacio para mover mango y otros productos del campo.
Mercancía segura
Por otra parte, Torres Berlín enfatizó que, por seguridad, toda la mercancía que se envía en los aviones va escaneada.
“Incluso se revisa que no haya explosivos. Se escanea, se pesa, tenemos todos los procedimientos de seguridad y todos los procedimientos para mantener la inocuidad y que no se toque la mercancía. Se cuida tanto la cadena de frío como su seguridad”, afirmó.
“Se cuidan todos los escrutinios de seguridad que nos implica la TSA (Administración de Seguridad en el Transporte de Estados Unidos, por su siglas en inglés) y las autoridades mexicanas”.
NTR
