Volaris continuará su expansión hacia Centro y Sudamérica mediante su subsidiaria en Costa Rica, informó su director general, Enrique Beltranena.
Lo anterior, detalló, al segundo año de operación de dicha subsidiaria; además, señaló que “en un primer paso hemos pensado arrancar operaciones entre Costa Rica y Guatemala, e ir haciendo los procesos regulatorios y de permiso país por país en los siguientes meses”.
Sin embargo, puntualizó en que esta expansión no significa modificar su modelo de negocios, ni que los mercados del país y de Estados Unidos están consumidos; tampoco buscan hacer de este país centroamericano su nuevo hub (centro de conexiones) como Tijuana, Guadalajara, Cancún o Monterrey.
La elección de Costa Rica para iniciar su filial, que iniciará operaciones el 1 de diciembre próximo, se debe a su estabilidad política y a un mayor número de operaciones aeronáuticas, así como su ubicación, entre otros factores.
En reunión con medios de comunicación mexicanos en el marco del 13o. Foro Anual Líderes de Aviación ALTA, dijo que con el inicio de operaciones en ese país, Volaris se convierte en la primera aerolínea mexicana con certificado de operación fuera de México.
La operación de su filial será en un principio con dos aviones A320, que forman parte de la solicitud de compra de la firma de 46 aviones, cuyo valor es de 92 millones de dólares y están contemplados para finalizar la orden hasta 2020.
Enrique Beltranena, expuso que para 2017 registrarán un aumento de 19 por ciento en la capacidad de asientos-milla, de los cuales, Costa Rica contribuiría con entre 3.0 y 4.0 por ciento, además de que la firma contribuyó a la creación de 450 empleos en el primer año.
En cuanto a la llegada de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos, comentó que la aerolínea cuenta con un mercado enfocado en visitantes, familiares y amigos, aunado a que no movilizan migrantes indocumentados.
Además, se cuenta con un tratado bilateral que no tiene preferencialismo a ciertas aerolíneas, debido a que es “piso a piso”, a su vez, son más fuertes las firmas estadunidenses que las mexicanas en el movimiento de pasajeros.
“Hay todas las condiciones para no tocar las condiciones entre las aerolíneas americanas y las del país, no veo, cuál sería el racional.
De igual manera, confirmó que están interesados en los slots (horarios de despegue y aterrizaje) que dejará Aeroméxico en el aeropuerto capitalino y Delta en Nueva York, como parte de su alianza profunda.
