A partir de este año, el Puerto Interior contará con un parque aeronáutico, que colindará con las pistas del Aeropuerto Internacional de Guanajuato.
La superficie que se destinará al polígono industrial aeronáutico es de 80 hectáreas.
De acuerdo con el proyecto, en esa superficie se instalarán empresas de partes para la manufactura de aeronaves, así como talleres de mantenimiento e infraestructura de carga aérea.
La empresa Sky Plus es la encargada de realizar el estudio para determinar las características de la zona de desarrollo aeronáutico.
La inversión para el proyecto ejecutivo, estudios topográficos y adecuación de terrenos asciende a 120 millones de pesos.
Actualmente en Guanajuato sólo hay tres plantas que atienden al sector aéreo, según la base de datos de la Federación Mexicana de la Industria Aeroespacial.
En contraste, en Querétaro ya hay 33 empresas aeronáuticas, incluyendo dos plantas armadoras de aviones y helicópteros (Bombardier y Eurocopter).
Tres empresas aeronáuticas de Querétaro tienen en conjunto más de 1,500 trabajadores.
El desarrollo de la industria aeronáutica en el Bajío requerirá de ingenieros especializados, técnicos y pilotos.
El campus Silao del Instituto Politécnico Nacional ya realiza desde hace seis años la formación de recursos humanos especializados en esta industria, pero se han sumado otras dos escuelas ubicadas en León.
Crean escuela para pilotos
Ondra Karas se percató de la inquietud que tenían los jóvenes que estudiaban Ingeniería en Aeronáutica por aprender pilotear aviones, ya que algunos entraron a la carrera con la idea de que aprenderían a hacerlo.
Inició con un alumno, pero los interesados en ser pilotos aumentaron en poco tiempo.
Fue así que el piloto y profesor del Instituto Politécnico Nacional decidió crear en el 2013 la escuela Bajío Flight Academy.
“Al ver que las escuelas más cercanas sólo estaban en Guadalajara o en Querétaro, y que no podían abandonar sus estudios, abrí una opción más cercana a ellos”.
La primera generación fue con un grupo de 20 alumnos, hasta el momento son seis alumnos quienes ya consiguieron su licencia de piloto privado.
Dentro de la academia los cursos son para piloto privado y piloto comercial. Las horas de clase teórica y práctica varían de acuerdo a lo que se busque.
La parte práctica se lleva en Celaya o Lagos de Moreno. Sin embargo, para poder recibir la licencia, Ondra Karas estableció un convenio en Indiana para que el resto de las horas se realicen allá a fin de facilitar la obtención de la licencia.
“Para piloto privado son 35 horas y para comercial 190 horas de vuelo más 150 horas de entrenamiento teórico”.
El director de la escuela comenta que la academia no es una carrera universitaria, ya que en el país vecino es muy fácil ser piloto.
“Con las licencias pueden trabajar en cualquier empresa de aerolínea, aviación ejecutiva, piloto de un avión fumigador, fotografía aérea e instructor”.
En cuanto a la bolsa de trabajo, Karas platica que México es uno de los países en los que es fácil obtener trabajo como piloto debido a la alta demanda y la poca competencia, además de las pocas horas de vuelo que se necesitan a comparación de países como Estados Unidos o Canadá.
“Hay muchas oportunidades porque no es sólo trabajar en las aerolíneas, existe también la aviación ejecutiva, que hay mucha y espero que haya más por todos los proyectos que se están haciendo, porque todavía en México es muy poca aviación general”.
Bajío Fligth Academy ahora busca tener un avión propio para facilitar las horas de práctica, ya que no todos tienen las posibilidades de solventar un viaje a Estados Unidos, y que hay quienes sólo quieren aprender por hobbie.
“Ya se tiene la suficiente inversión y a las personas, sólo es cuestión de definir cuál avión se necesita y dónde se va a ubicar”. Menciona que muy probablemente será en Celaya.
Ondra Karas asegura que las oportunidades en México en este rubro crecerán, tanto en aviación ejecutiva como en la general, ramas que aún no están del todo desarrolladas en el país.
Egresan 170 ingenieros
El Instituto Politécnico Nacional (IPN) ofrece la Ingeniería en Aeronáutica en su campus ubicado en el Puerto Interior.
En cinco generaciones han egresado alrededor de 170 alumnos, y hay otros 395 inscritos en todos los niveles.
Los egresados ya laboran en empresas aeronáuticas del Bajío, o de otros puntos del País, como AB Aerolíneas, Interjet, Volaris, General Electric, Snecma y Bombardier Aerospace.
La carrera la abrió el IPN en el Puerto Interior, con la expectativa de que en la zona se desarrollará la industria aeronáutica.
El director de la Unidad Profesional Interdisciplinaria de Ingeniería, Aldelmo Reyes, explica que dentro de lo que se preveía que iba a detonar en el estado era principalmente la industria automotriz, y venía de la mano con el desarrollo en aeronáutica.
Aunque el director aclara que aún es incipiente la llegada de empresas del sector aeronáutico, Guanajuato debe adentrarse desde ahora para entender la necesidad del mercado.
“Independientemente de que el estado esté apenas arrancando en el tema aeronáutico, la necesidad es atendida con algunas empresas que están llegando o pretenden llegar, por lo que le apostamos a nivel nacional”.
Para cursar esta carrera los jóvenes deben comprender que el compromiso es demandante, con trabajo bajo presión, atendiendo múltiples proyectos.
Al mismo tiempo, deben tener disposición de trabajar en equipo, tener habilidades de liderazgo y manejar el idioma inglés.
Estudian en China, Francia y Rusia
Las mujeres se han abierto a este campo de estudios. Diana Méndez, alumna de octavo semestre, fue la primera estudiante que logró ir seis meses de intercambio a la Universidad de Beijing; ella cuenta que la experiencia fue única al conocer otra perspectiva de la aeronáutica en un país con alto desarrollo tecnológico.
Sin embargo asegura que México cuenta con una gran capacidad para estar a la par de grandes países, tanto académica como laboralmente.
“Muchas mujeres pueden hacerlo ya que no implica operaciones de fuerza”.
Los alumnos también han tenido la oportunidad de ir de intercambio a Francia, Rusia, República Checa y Estados Unidos.
De nivel internacional
Higinio Juárez, jefe de departamento de formación profesional aeroespacial, agrega que hace cuatro años participaron en Brasil en una competencia y están planeado participar para el 2016.
En verano pasado en General Electric participaron dos meses en proyectos de la empresa implicados en ingeniería de turbinas de avión; los resultados fueron un primer y segundo lugar.
El director Aldelmo Reyes informó que proyectan abrir en 2016 un posgrado en tecnología avanzada que permita atender cualquier necesidad de la industria o de investigación básica en el sector aeronáutico, automotriz y biotecnológico.
Además buscarán que toda la plantilla de docentes sea bilingüe, por los tecnicismos que la misma carrera exige, así como impulsar a los investigadores a que sus estudios sean apropiados para aplicarlos en empresas.
“Un ingeniero aeronáutico es alguien que tiene que llevar una cultura muy arraigada respecto a los controles de calidad, responsabilidad y la calidad del trabajo, un avión es de los transportes más seguro que existe, pero tiene que ver con la calidad de las personas que trabajan en el sector aeronáutico”.
Forman técnicos aéreos
El Colegio Aeronáutico Bajío (CAB) se prepara para abrir sus puertas en León.
La directora académica, Teresa Briones, explica que decidieron abrir el colegio en Guanajuato, porque el estado está estratégicamente ubicado en el centro del País, lo que atraerá a alumnos de otras entidades, como San Luis Potosí, Zacatecas y Querétaro.
Reconoce que la cercanía con Querétaro, donde ya hay una industria aeronáutica en auge, beneficia al colegio.
“Ya habíamos visto tiempo atrás lo que pasó en Querétaro al integrar la aeronáutica. Ayudados de la ubicación, Guanajuato puede ser un nicho de mercado importante”, asegura.
“Estamos en el momento exacto, en donde los empresarios ya vieron que México es un mercado importante y se está tratando de formar un clúster aeronáutico en Guanajuato”.
El proyecto intentará acercar a los jóvenes desde la preparatoria a la manufactura en aeronáutica, para después darle un seguimiento a nivel profesional en mantenimiento de motores y planeadores, y sistemas electrónicos de aeronaves.
En un inicio, se ofrecerán estudios de técnico en aeronáutica.
“Un técnico es muy importante porque si el avión está mal y no puede volar, la responsabilidad es de él; debe tomar decisiones, trabajar bajo presión, estar al día para poderse desarrollar”.
La apertura de la carrera se proyecta para el 2016, con un cupo de sólo 20 alumnos, debido al diseño de los salones. Una vez terminado el edificio de tres niveles, el colegio tendrá capacidad de recibir 600 alumnos.
“Nos ha llevado cinco años el proceso, muchos encantos y desencantos, muchos aprendizajes, unión con pedagogos, con gente de aeronáutica, pero nuestro proyecto pedagógico no es una escuela tradicional sino constructivista, donde el alumno va a construir su conocimiento”.
Para la bolsa de trabajo han contactado a empresas como Monterrey Jet Center, Servicios Integrales Aeronáuticos, Aeroméxico, Volaris y Aerosoluciones.
AM