El Puerto de Valencia bate su récord con 1,5 millones de contenedores movidos en cuatro meses
El Puerto de Valencia vuelve a superar su récord de contenedores movilizados. Por primera vez en su historia, el recinto ha rebasado la cifra de 1,5 millones de TEU gestionados en un cuatrimestre. Ello ha sido posible por el notable incremento de la actividad que arrastra desde el principio de año -con crecimientos mensuales por encima del 10%-, impulso que le ha permitido recuperar el liderazgo del Mediterráneo en tráfico de contenedores.
Aunque los datos aún son provisionales -la estadística definitiva se conocerá la próxima semana- el presidente del Puerto, Rafael Aznar, destacó ayer que sólo en el mes de abril el aumento del tráfico de TEU estará más próximo al 15% que al 10%, lo que le ha permitido cerrar el cuatrimestre en niveles nunca vistos. Hasta marzo, el tráfico de TEU ya alcanzó los 1,16 millones, casi 150.000 más que en el mismo periodo de 2014.
Este «salto cualitativo» en los tráficos, según definió ayer Aznar, se debe a la evolución positiva del comercio exterior, unido a la recuperación del tráfico de contenedores en transbordo -que son descargados en Valencia pero que tienen otros puertos como destino-, que crece en porcentajes que rozan el 20% y que, en volumen de TEU, superan al tráfico de import-export.
Para el responsable de la Autoridad Portuaria de Valencia, la explicación a los buenos datos es la «correcta orientación comercial» del servicio a la empresa, unido a las líneas trazadas en su último plan estratégico. De continuar con el actual ritmo de crecimiento, el recinto cerraría el año por encima de los 4,5 millones de TEU. «La tendencia se va a mantener», pronosticó Aznar.
Según el plan estratégico en vigor para el periodo 2009-20, el objetivo es llegar al último año de aplicación del plan con un tráfico anual de entre 5,6 y 6,2 millones de TEU frente a los 4,2 que movilizó en 2010.
Pese a todo, el responsable del recinto evitó caer en la «autocomplacencia» y destacó que hay «margen de mejora» en temas como el ajuste de costes y la productividad. «Hemos resuelto más que correctamente la gran conectividad marítima, pero en las conexiones terrestres tenemos una debilidad centrada en la línea con Aragón», destacó Aznar en referencia a la vieja línea férrea que pasa por Teruel cuya modernización está pendiente por falta de inversiones.
A pesar del estado actual de la ruta, la factoría de General Motors ha aprobado recientemente el envío de vehículos al Puerto de Valencia para exportación. «Tenemos una demanda real creciente, la de Opel», destacó Aznar, lo que a su juicio suma «argumentos para reclamar con más fuerza» las inversiones pendientes.
Precisamente ayer, General Motors celebró la salida de sus líneas de producción del vehículo 12 millones, un hito para la factoría de Figueruelas, que aspira a superar la barrera de los 500.000 coches al año.
El responsable de la APV manifestó ayer que en la reciente feria Transport Logistic en Munich reiteró esta reivindicación ante el presidente de Puertos del Estado y con el respaldo del presidente del Puerto de Bilbao, beneficiado también por ese corredor ferroviario. Para Aznar, la conectividad terrestre es la clave para el reequilibrio portuario en Europa, que actualmente se iniclina a favor de recintos como el de Hamburgo o Rotterdam en una proporción de tres a uno.
Por otro lado, la APV también dio luz verde a las condiciones que se exigirán para la prestación del servicio comercial del transporte terrestre en función de las recomendaciones de Puertos del Estado. Desde ahora serán los puertos los que deberán tener un registro de los camiones que pueden transportar contenedores, que deberán acreditarse previamente.
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