Las aerolíneas de bajo coste están acaparando el tráfico nuevo que llega a los aeropuertos españoles. En total, la llegada de pasajeros internacionales creció entre enero y abril un 5,8%, hasta los 18,1 millones de viajeros. De estos, casi la mitad (el 47,5%) llegaron con compañías low cost, que dispararon su actividad el 11,7% en el primer tercio del año. Mientras, las empresas tradicionales solo crecieron el 1,1%. El crecimiento de Vueling e Iberia Express, la expansión de nuevos jugadores como Norwegian y sobre todo el fuerte impulso de Ryanair, compañía líder en España, permiten imponerse al bajo coste.
Los británicos son los principales viajeros internacionales de las low cost hacia España (son el 33,2% del total) y Cataluña es el principal destino del bajo coste, ya que allí llega el 29,8% de los turistas de estas compañías, la gran mayoría a Barcelona. Mientras, los alemanes son los que más viajan en compañías tradicionales (son el 22,1% del total) y Madrid el lugar en el que más negocio mantienen estas empresas. Sin embargo, el bajo coste se dispara también en la capital: entre enero y abril los pasajeros low cost crecieron más del 35% en Barajas.
El avance del bajo coste en España es un fenómeno que lleva años fraguándose. En 2003, el primer año que comenzó a recogerse la estadística de viajeros por tipo de compañía, había unos 10 millones de pasajeros low cost, de los 44 millones que llegaban en total a España. Durante los siguientes años crecieron a doble dígito los pasajeros. En 2013 sufrieron un bache, y las estadísticas comenzaron a desinflarse, sobre todo por la reducción de rutas de Ryanair, que decidió replegarse. Pero en 2015 las compañías baratas retoman el pulso.
Actualmente las compañías de bajo coste transportaron 8,6 millones solo en los primeros cuatro meses del año, y su cuota de mercado se ha duplicado y más con respecto a una década atrás. Según las estadísticas publicadas este lunes por el Instituto de Estudios Turísticos, solo en el mes de abril las low cost acapararon el 52,5% del tráfico, con Ryanair a la cabeza (12,6%), seguida de Easyjet (6,7%) y Vueling (5,6%).
Casi todos los aeropuertos españoles grandes han cerrado el primer tercio del 2015 con un significativo aumento del tráfico total, tanto de aerolíneas baratas como tradicionales. Por aeropuertos, el de Madrid-Barajas es el que más viajeros internacionales nuevos ha captado, con una mejora de las llegadas del 13,3%. Le sigue Barcelona, con un aumento del 7,7%.
Los vuelos baratos ganan terreno en Madrid
La distribución entre llegadas de bajo coste y aerolíneas tradicionales está directamente vinculada a la oferta comercial de cada instalación. Madrid lidera todavía el tráfico más convencional, porque es el centro de operaciones de Iberia, pero también por la presencia de Air Europa, las conexiones de otras antiguas compañías de bandera como Air France o los operadores jóvenes del Golfo como Emirates y Qatar Airways. Estas últimas también trabajan en Barcelona, pero allí Vueling es la aerolínea líder y también Norwegian ha ganado peso.
Sin embargo, el liderazgo de Madrid en compañías tradicionales empieza a diluirse. Tanto en Barajas como en El Prat la compañía Ryanair está creciendo con mucha fuerza, y trasvasando rutas desde sus antiguos feudos, situados antes en aeropuertos secundarios como el de Girona. Y el enorme impulso de la irlandesa en Barajas está haciendo que en estas instalaciones también ganen peso los vuelos baratos.
En concreto, los viajeros low cost en Barajas han crecido en conjunto un 35,3% entre enero y abril. Casi todo ese aumento llega de la mano de Ryanair, ya que en ese periodo la irlandesa movió en la capital 1,54 millones de pasajeros, según datos de AENA. Eso supone un crecimiento del 34% en comparación con el mismo periodo del año anterior.
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