“El Gobierno Federal pretende que al cierre de 2016 la capacidad operativa de los puertos mexicanos sea de 405 millones de toneladas de carga, pero el desempeño de la actual infraestructura portuaria la entidad y en el país está por debajo de su potencial; aunque podría ser mucho mayor si se invirtiera más en los próximos años en infraestructura portuaria y en nuevos proyectos”.
Así lo planteó el doctor Alejandro Díaz Bautista, economista, además de profesor y catedrático de El Colegio de la Frontera Norte (El Colef), en el análisis Inversión en Infraestructura Portuaria.
“El objetivo estratégico de la política económica portuaria de México con respecto a las concesiones portuarias es apoyar el crecimiento económico y el desarrollo socioeconómico del país, promoviendo el desarrollo y crecimiento de la infraestructura con nuevos proyectos, al igual que del conglomerado logístico y del transporte nacional e internacional”, apuntó.
En todo el país se deben incrementar las inversiones en materia portuaria considerando las ventajas comparativas y competitivas que ofrece la región y el país y los beneficios esperados de esta industria. Se debe promover el desarrollo de actividades que añadan valor y permitan un mejor aprovechamiento nuestra posición geográfica.
De igual manera se debe seguir con un plan maestro de infraestructura y desarrollo portuario de corto, mediano y largo plazo; con estimaciones y pronósticos confiables donde el Gobierno Federal y el de los Estados deben de tener la figura de regulador en materia portuaria. Los puertos son la puerta de entrada por donde pasa la mayoría de los productos del comercio económico internacional, al igual de ser la interfase entre el transporte terrestre y marítimo, destacó el economista.
“Los puertos son parte de la cadena de transporte internacional y del comercio mundial. Los puertos son fundamentales en la política económica, ya que permiten hacer más eficiente el sistema de transporte de los mismo, fomentan el crecimiento del comercio con otros países, alivian la congestión de los principales corredores terrestres, mejoran los enlaces marítimos con las regiones insulares y periféricas de un país y refuerzan el transporte multimodal y la logística del transporte”, afirmó.
Con el programa Marca de Calidad, se trata de modernizar a los puertos, al tratar de aplicar una serie de estándares de calidad que garantizan la prestación de determinados servicios en los puertos mexicanos. La finalidad de dichas acciones será mejorar la calidad de los servicios al cliente al elevar la eficiencia de sus procesos, así como posicionar a las terminales portuarias como factor clave para el desarrollo del comercio marítimo nacional e internacional.
Los estándares han sido acordados por los principales actores de la cadena logística, que incluye a agentes aduanales, líneas navieras, terminales portuarias, maniobristas, autotransporte federal y ferrocarriles en los puertos de Manzanillo, Lázaro Cárdenas, Veracruz y Altamira. De esta forma se logra una mayor coordinación para detectar ineficiencias y oportunidades de mejora en los procesos de la cadena logística y portuaria, desde que arriba un buque, hasta que la carga se entrega al usuario final, agregó Díaz Bautista.
“Entre los trabajos más importantes se concentran 25 proyectos portuarios que consolidarán dos sistemas complementarios: el del Golfo de México con el nuevo puerto de Veracruz y Altamira, así como el del Pacífico con Manzanillo y Lázaro Cárdenas. Estos abarcan importantes obras como la ampliación de una terminal de usos múltiples en el Puerto de Manzanillo, la conclusión de la Terminal Especializada de Contenedores I (TEC I) en Lázaro Cárdenas, Michoacán; además del nuevo Puerto de Tuxpan, que será el puerto integral más cercano a los estados del centro del país”, concluyó.
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