China ha firmado un acuerdo con Malasia para establecer un hermanamiento entre dos importantes ciudades portuarias, que se enmarca en la intención de ambos países de rejuvenecer la antigua Ruta de la Seda marítima.
El Puerto de Qinzhou, en la región autónoma de la etnia zhuang de Guangxi, en el sur de China, se ha convertido en un puerto hermano de Kuantan, una ciudad portuaria en Malasia, tras el acuerdo firmado en la ciudad de Nanning, capital de Guangzi, este lunes.
El pacto, que entra en vigor de forma inmediata, implica que los dos puertos cooperarán en diversos campos, entre los que se incluyen corredores de transporte marítimo compartidos, logística, intercambio de información y formación de talentos, indicó el alcalde de Qinzhou, Li Xinyuan.
El hermanamiento de los dos puertos forma parte de un plan para establecer una red de cooperación entre ciudades portuarias de los miembros de la Asociación de Naciones del Sureste Asiático (ASEAN), apuntó Li.
Las dos ciudades portuarias tienen estrechas relaciones económicas y comerciales. China y Malasia han ido construyendo parques industriales hermanos en Qinzhou y Kuantan, respectivamente, desde 2011. Establecer este tipo de infraestructuras hermanadas es visto como un innovador experimento de China y Malasia en la reconstrucción de la Ruta de la Seda marítima.
El Sudeste Asiático ha sido durante mucho tiempo un importante centro en la Ruta de la Seda marítima, una ruta comercial a través de la que China vendía seda, cerámica y té a países extranjeros.
El presidente chino, Xi Jinping, propuso una Ruta de la Seda marítima del siglo XXI durante su visita a Indonesia en octubre del año pasado.
Qinzhou, el centro de transporte de contenedores más importante de la costa suroeste de China, se convertirá en una ciudad líder en la Ruta de la Seda marítima del siglo XXI, afirmó Li.
CRI